La historia de los Globos Aerostáticos empieza a finales del siglo XVIII, en Francia.
Los hermanos Montgolfier (de Annomay, Francia) fueron los primeros en construir un globo de papel. Utilizando un gas mucho más ligero que el aire, consiguieron que éste se elevara, en su primera ascensión, hasta los quinientos metros. ¡Habían inventado el globo aerostático!
En el año siguiente, en 1783, los hermanos Montgolfier, en una demostración en el Palacio de Versalles, colgaron un cesto del globo y metieron dentro a una oveja, un pato y un gallo. Fueron los primeros pasajeros de la historia del globo aerostático.
El primer vuelo con personas se realizó el mismo año 1783, en esta ocasión los intrépidos fueron Pilâtre de Rozier y el Marquès de Arlandes que ascendieron hasta 1000 metros de altura, durando el vuelo unos 25 minutos, y recorriendo unos 10 Km. El globo aerostático confeccionado por los hermanos Montgolfier, llevaba una cesta de mimbre en la que se había colocado un horno de leña con el fin de mantener el aire caliente dentro del globo.